Susana Vs Bandana
El reencuentro del grupo musical Bandana logró picos de audiencia esta semana en el programa de Susana Giménez. Pasaron varios años desde que se separaron y la expectativa creció a lo largo del reportaje de casi una hora: cuando los productores vieron que la audiencia crecía, empezaron a hacer las típicas señas que Susana odia recibir de detrás de cámara; que estire, que siga, que pregunte.
Pero el cuestionario que le anotan en su ayuda memoria se agota y ella empieza a remar. Ya se ha quejado al aire varias veces por esta actitud, al punto de recriminar “hay que estar acá sentado…”, como un pasajero de subte que se queja porque el vagón está abarrotado.
De todos modos la visita de las Bandana pareció distendida. Su estaba interesadísima en el romance de Valeria Gastaldi con el mega famoso cantante español Alejandro Sanz. El resto no le importaba demasiado pero hizo como sí.
El problema llegó cuando a Susana, o a su iluminada producción, se les ocurrió proponerle a las chicas que se “canten algo”, a lo que se negaron terminantemente . Nada de cantar, dijeron, pero creyeron que las convencerían. No fue el caso. Las chicas parece que vieran al mismísimo demonio cuando tienen que recordar la letra de aquellos hits que las llevaron a la fama por poco dinero.
Ahí está la cuestión. En su momento, los leoninos contratos que las tuvieron como protagonistas de un suceso mucical no se vieron reflejados en sus cuentas bancarias; todos ganaron muchisima plata con Bandana, menos las propias Bandana. ¡Vaya problemón! Cuando ganaron el reality “Popstars” que las catapultó, no tuvieron en cuenta aquella letra chica que le impidió hacerse ricas con el gigantesco éxito de ventas de su primer disco, sus Gran Rex repletos, su película, su marketing y la mar en coche
Así que cantar ahora…. no no no. De ninguna manera. Si quieren que canten, que paguen. Y mucho. Hasta el propio Marcelo Iripino, colaborador de Susana y director artístico del cuerpo de bailarines y cantantes que la acompañan, insistió al aire, pero nada. Susana se quedó enojada por la poca predisposición de las otrora chicas éxito. Si hubiesen cantado no habría sido necesario estirar y preguntar tanto.
De todos modos, a más de uno, y a ellas mismas, les quedó la sensación al ver cómo el reting crecía y crecía al ver a las Bandana juntas otra vez. ¿Qué tal un concierto reencuentro, un disco en vivo? Y si esta vez les pagan bien… Total, vuelven los Cadillacs, volvió Soda, ¡cómo no van a volver ellas! Otra vez la vinchita y el “Dance, dance, dance, hoy tu sueño es real…”.Pero por plata: soñar gratis, para ellas, nunca más.
Miércoles 12 de Noviembre de 2008 17:19
Pero el cuestionario que le anotan en su ayuda memoria se agota y ella empieza a remar. Ya se ha quejado al aire varias veces por esta actitud, al punto de recriminar “hay que estar acá sentado…”, como un pasajero de subte que se queja porque el vagón está abarrotado.
De todos modos la visita de las Bandana pareció distendida. Su estaba interesadísima en el romance de Valeria Gastaldi con el mega famoso cantante español Alejandro Sanz. El resto no le importaba demasiado pero hizo como sí.
El problema llegó cuando a Susana, o a su iluminada producción, se les ocurrió proponerle a las chicas que se “canten algo”, a lo que se negaron terminantemente . Nada de cantar, dijeron, pero creyeron que las convencerían. No fue el caso. Las chicas parece que vieran al mismísimo demonio cuando tienen que recordar la letra de aquellos hits que las llevaron a la fama por poco dinero.
Ahí está la cuestión. En su momento, los leoninos contratos que las tuvieron como protagonistas de un suceso mucical no se vieron reflejados en sus cuentas bancarias; todos ganaron muchisima plata con Bandana, menos las propias Bandana. ¡Vaya problemón! Cuando ganaron el reality “Popstars” que las catapultó, no tuvieron en cuenta aquella letra chica que le impidió hacerse ricas con el gigantesco éxito de ventas de su primer disco, sus Gran Rex repletos, su película, su marketing y la mar en coche
Así que cantar ahora…. no no no. De ninguna manera. Si quieren que canten, que paguen. Y mucho. Hasta el propio Marcelo Iripino, colaborador de Susana y director artístico del cuerpo de bailarines y cantantes que la acompañan, insistió al aire, pero nada. Susana se quedó enojada por la poca predisposición de las otrora chicas éxito. Si hubiesen cantado no habría sido necesario estirar y preguntar tanto.
De todos modos, a más de uno, y a ellas mismas, les quedó la sensación al ver cómo el reting crecía y crecía al ver a las Bandana juntas otra vez. ¿Qué tal un concierto reencuentro, un disco en vivo? Y si esta vez les pagan bien… Total, vuelven los Cadillacs, volvió Soda, ¡cómo no van a volver ellas! Otra vez la vinchita y el “Dance, dance, dance, hoy tu sueño es real…”.Pero por plata: soñar gratis, para ellas, nunca más.
Miércoles 12 de Noviembre de 2008 17:19